Luego de que los tres señalados de mutilar el monumento a Cuauhtémoc, ubicado en el Paseo de la Reforma de la Ciudad de México fueran liberados, la Secretaría de Cultura, a través del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) ha dado su posicionamiento.
A través de un comunicado la dependencia informó que, pese a que los sujetos han sido liberados, no ha sobreseído el juicio, por lo que confía en la continuidad de las investigaciones de la Fiscalía General de la República (FGR) para presentar ante el juez a los responsables del delito.
“La misma autoridad no ha sobreseído el juicio, al advertir que efectivamente se trata de un delito. Por lo anterior, la Fiscalía General de la República continúa con las investigaciones para presentar ante el juez a los presuntos responsables”.
Además, el INAH reiteró su confianza y respeto a la FGR, y señaló que estará al pendiente en caso de que esta requiera de su apoyo para que se aprehendan a los responsables de haber dañado el monumento.
“El INAH reitera su confianza y respeto por el trabajo que desempeña la Fiscalía y estará atento para coadyuvar en el ámbito de su competencia hasta que se determine a los responsables de este delito que afectó bienes que son patrimonio cultural de los mexicanos”, añadió.
Cabe recordar que los hoy liberados de 26, 35 y 48 años de edad fueron detenidos el pasado 30 de diciembre y señalados de cometer el delito según la Ley de Monumentos.
“Oficiales que realizaban un recorrido de vigilancia y seguridad en calles de la colonia Juárez fueron requeridos por una persona que les indicó que detrás de la valla que rodea el monumento a Cuauhtémoc, se encontraban varios sujetos que cortaban y sustraían piezas del lugar”, comentó en su momento la Secretaría de Seguridad capitalina en un comunicado.
Sin embargo, la mañana de este seis de enero, durante la continuación de la audiencia de vinculación a proceso en la carpeta de investigación 520/2020, los tres hombres fueron liberados porque el informe que tomó la policía el día de los hechos no correspondía con lo que ocurrió en realidad.
De tal modo, en la diligencia el abogado de los tres acusados solicitó al juez de control del Centro de Justicia Penal Federal en el Reclusorio Oriente los vídeos de las cámaras de seguridad para confirmar que los policías que detuvieron a los investigados habían mentido en su reporte.