Viajar en 2026 será distinto a lo habitual. Algunos de los destinos más famosos del mundo no estarán disponibles para el público, ya sea por renovaciones, reconstrucciones o cierres definitivos. Museos, templos, parques y hasta librerías que solían recibir miles de visitantes quedarán fuera de los itinerarios turísticos, marcando una nueva etapa en el turismo global.
Este escenario contrasta con las clásicas listas de “lugares imperdibles” y pone sobre la mesa una realidad clara: el patrimonio cultural y de entretenimiento también cambia, se transforma o, en algunos casos, desaparece.
Museos y espacios culturales son destinos en pausa
Uno de los cierres más llamativos es el del Centro Pompidou en París.
Este icónico museo, famoso por su arquitectura revolucionaria, cerró para someterse a una renovación integral que incluye mejoras de accesibilidad y la eliminación de amianto.
Su reapertura está prevista hasta 2030.
Como alternativa, los amantes del arte moderno podrán mirar hacia KANAL, en Bruselas, que abrirá en noviembre de 2026 en una antigua fábrica de automóviles.
También en Francia, el Museo del Tapiz de Bayeux cerró para modernizar sus instalaciones.
La reapertura se espera para 2027, aunque el tapiz podrá verse temporalmente en el Museo Británico durante 2026.
Otra opción cultural es el Museo Bonnat-Helleu, en Bayona, conocido como el “Pequeño Louvre”.
En Nueva York, la azotea del Museo Metropolitano de Arte permanecerá cerrada hasta 2030 por un ambicioso proyecto de ampliación.
Para quienes buscan arte al aire libre, el Parque de Esculturas de Sócrates, en Queens, se presenta como una alternativa atractiva.
Templos, memoria y espacios históricos
El templo Gounsa, en Corea del Sur, con más de 1,300 años de historia, quedó casi destruido tras un incendio forestal en 2025.
Aunque su restauración ya comenzó, no hay fecha para su reapertura.
En la misma región, el Templo Bongjeongsa se perfila como una opción para conocer el legado budista del país.
Otro sitio envuelto en misterio es el de las Catacumbas de París, cerradas por reparaciones.
Aunque se prevé su reapertura en 2026, aún no hay una fecha confirmada.
Como alternativa, el Osario de Sedlec, en República Checa, o el Cementerio de Montparnasse ofrecen experiencias similares ligadas a la memoria histórica.
Atracciones y espacios que dicen adiós
En Las Vegas, el Museo de Coleccionismo y Diseño cerró definitivamente tras la demolición del centro comercial que lo albergaba. Su colección ahora viaja por Estados Unidos, sin una sede fija.
Para quienes buscan algo fuera de lo común, Omega Mart ofrece una experiencia artística inmersiva bajo la apariencia de un supermercado.
En Walt Disney World, la zona de Rivers of America cerró para dar paso a una gran expansión inspirada en la franquicia Cars. Los fans de Tom Sawyer aún pueden visitar versiones similares en Disneyland California y Tokio Disneyland.
En Nueva York, la histórica librería Bluestockings, un referente feminista y cooperativo, cerró definitivamente tras más de 26 años. Aun así, la ciudad sigue viva literariamente con nuevas librerías independientes como Yu & Me, Ripped Bodice y The Lit Bar.
Los destinos cerrados en 2026 obligarán a los viajeros a mirar más allá de los clásicos y a descubrir nuevas experiencias.
Aunque algunos íconos quedarán fuera del mapa por un tiempo, las alternativas demuestran que el turismo no se detiene: simplemente se transforma.
