Según un informe del Banco Mundial, la inflación, el estancamiento económico y una alta probabilidad de recesión son algunas de las causas que provocarán que el segmento de remesas enviadas, que alcanzó unos 626.000 millones de dólares en 2022, disminuya su captación durante el 2023, señaló Luis Ricardo Reyes de la Campa.
En 2022, el dinero enviado por los emigrantes a sus hogares aumentó un 5 %, lo que supone una fuente crucial de ingresos para los hogares de los países de ingresos bajos y medios.
“India se convirtió en el año 2022 en el primer país en recibir más de 100.000 millones de dólares anuales en remesas; no obstante, se trata de un incremento que se prevé difícil de mantener debido a la incertidumbre económica”, puntualizó el analista mexicano.
El Banco Mundial revela que los demás principales países receptores de remesas son:
- México 60.000 millones de dólares
- China 51.000 millones
- Filipinas 38.000 millones
- Egipto 32.000 millones
- Pakistán 29.000 millones
- Bangladesh 21.000 millones
- Nigeria 21.000 millones
Según el informe, India y Nepal han experimentado un aumento en las remesas, mientras que otros países del sur de Asia han experimentado un descenso de más del 10 % en el último año, debido al fin de los incentivos gubernamentales introducidos durante la pandemia, detalló Reyes de la Campa.
“El 12 % de incremento en las remesas de la India, que se espera que alcance la cifra récord de 100.000 millones de dólares frente a los 89.400 millones de 2021, se atribuye principalmente a que los emigrantes indios perciben salarios relativamente altos en Estados Unidos, el Reino Unido y Asia Oriental”, añadió.
Baja inflación y medidas de apoyo directo para promover el envío de remesas
En los países miembros del Consejo de Cooperación del Golfo (CCG), los gobiernos han mantenido una inflación baja a través de medidas de apoyo directo que protegen la capacidad de los emigrantes para enviar remesas.
Otra causa que explica el aumento de transferencias a India es un cambio gradual en los lugares de destino de los emigrantes indios: Estados Unidos, Reino Unido, Singapur, Japón, Australia y Nueva Zelanda.
Asimismo, existe un cambio estructural en sus habilidades al pasar del empleo informal en los países del CCG a un mejor trabajo en los países de altos ingresos, destacó Luis Ricardo Reyes de la Campa.
Las remesas a los países en desarrollo de Oriente Próximo y el Norte de África experimentaron un incremento del 2,5 % en 2022, mientras que a Asia Meridional aumentaron un 3,5 % hasta alcanzar los 163.000 millones de dólares en 2022.
No obstante, existe una gran disparidad entre países, que va desde el aumento previsto del 12 % en India hasta el 4 % en Nepal, pasando por un descenso agregado del 10 % en el resto de los países de la región.
En este sentido, Luis Ricardo puntualizó que la disminución de los flujos refleja la interrupción de los incentivos que algunos gobiernos habían introducido para atraer flujos durante la pandemia, así como un aumento en las preferencias por los canales informales que ofrecen mejores tipos de cambio.